Producto

La doble cara de la incertidumbre: Dostoievski en el Teatro Libre

                    object(stdClass)#3697 (5) {
      ["noshare"]=>
      bool(true)
      ["role"]=>
      string(3) "A01"
      ["roleonixlist"]=>
      string(2) "17"
      ["name"]=>
      string(14) "Varios autores"
      ["label"]=>
      object(Magento\Framework\Phrase)#3767 (2) {
        ["text":"Magento\Framework\Phrase":private]=>
        string(6) "Author"
        ["arguments":"Magento\Framework\Phrase":private]=>
        array(0) {
        }
      }
    }
                
  • Autor(es)
  • Varios autores

Disponibilidad de la publicación

A la venta en este portal

Libro impreso ISBN 9789586954884
$ 41.000

Debes seleccionar al menos un formato

Especificaciones por formato:

Impreso

    Estado de la publicación: Activo
    Año de edición: 2010
    ISBN-13: 9789586954884
    Páginas: 170
    Tamaño(cm): 14 x 21.2
    Peso (kg): 0.2200 kg
    SKU (Número de Referencia): 35361
Cómo citar

Los eBooks comprados en este catálogo editorial se acceden mediante vista en línea dentro de este mismo entorno, o, para vista fuera de línea, a través de Scholar App (PC/Mac) y Mōn'k App (iOS/Android). El usuario final no recibirá archivo PDF o EPUB ni por correo ni por descarga.

En los apuntes para la composición de los demonios, Dostoievski escribió: Shakespeare es un profeta enviado por Dios para proclamar el misterio del Hombre y del alma humana. Más allá de la contundente afirmación subyace el asunto de si la admiración por el autor inglés se reducía meramente a la que sentía por el hombre de letras o si, además, implicaba una atracción mucho más específica por el dramaturgo y por su oficio. Dostoievski empezó a cultivar una devoción por el magnetismo de la voz que ponía en escena, por decirlo de alguna manera, los grandes asuntos de la literatura universal. Esta afición lo convirtió, a su vez, en un hombre que leía con vehemencia apartes de sus novelas ante auditorios colmados de admiradores, e incluso, en un orador destacado, como se deduce de la impresión que causó en un público privilegiando su discurso pronunciado a los sesenta años en el homenaje a Pushkin.La relación de Dostoievski con el teatro no se limitó a su papel de espectador, porque hay registros de que en su juventud escribió por lo menos tres libretos: María Estuardo, Iankel el judío y Boris Godunov, cuyos originales lamentablemente ya no existe. Pero esos no fueron sus únicos intentos de crear piezas dramáticas. A su amiga, la destacada actriz, Alexandra Kulikova, le expresó en una ocasión Si yo tuviera el más mínimo talento para escribir una comedia, aunque fuera un acto, lo escribiría para usted; y pensando en ella se planteó la posibilidad de adaptar Netochka Nezvanova para la escena. Asimismo, el primer boceto de la alquería de Stepanchikovo y sus vecinos había sido imaginado como una obra de teatro. Es más, ya al final de su vida, el autor estaba considerando la posibilidad de darle forma teatral a un episodio de los hermanos Karamazov, además de haber aiutorizado, en distintas ocasiones, la adaptación de varias de sus obras, siempre anotando algunas sugerencias, como cuando aconsejó al estudiante Mijaíl Fedorov: La escena no es un libro. Por lo tanto, entre más corta, me parece mejor. Nota: contiene imágenes y fotografías a color, impresas en papel esmaltado."Con esta difícil elección, el Teatro Libre de Bogotá va contra la corriente porque está reivindicando una vez más la tradición clásica y moderna de un teatro donde el diálogo denso, sin concesiones a lo espectacular, es lo que prima"Dostoievski empezó a cultivar una devoción por el magnetismo de la voz que ponía en escena, por decirlo de alguna manera, los grandes asuntos de la literatura universal. Esta afición lo convirtió, a su vez, en un hombre que leía con vehemencia apartes de sus novelas ante auditorios colmados de admiradores, e incluso, en un orador destacado, como se deduce de la impresión que causó en un público privilegiando su discurso pronunciado a los sesenta años en el homenaje a Pushkin.La relación de Dostoievski con el teatro no se limitó a su papel de espectador, porque hay registros de que en su juventud escribió por lo menos tres libretos: María Estuardo, Iankel el judío y Boris Godunov, cuyos originales lamentablemente ya no existe. Pero esos no fueron sus únicos intentos de crear piezas dramáticas. A su amiga, la destacada actriz, Alexandra Kulikova, le expresó en una ocasión Si yo tuviera el más mínimo talento para escribir una comedia, aunque fuera un acto, lo escribiría para usted; y pensando en ella se planteó la posibilidad de adaptar Netochka Nezvanova para la escena. Asimismo, el primer boceto de la alquería de Stepanchikovo y sus vecinos había sido imaginado como una obra de teatro. Es más, ya al final de su vida, el autor estaba considerando la posibilidad de darle forma teatral a un episodio de los hermanos Karamazov, además de haber aiutorizado, en distintas ocasiones, la adaptación de varias de sus obras, siempre anotando algunas sugerencias, como cuando aconsejó al estudiante Mijaíl Fedorov: La escena no es un libro. Por lo tanto, entre más corta, me parece mejor. Nota: contiene imágenes y fotografías a color, impresas en papel esmaltado."Con esta difícil elección, el Teatro Libre de Bogotá va contra la corriente porque está reivindicando una vez más la tradición clásica y moderna de un teatro donde el diálogo denso, sin concesiones a lo espectacular, es lo que prima"La relación de Dostoievski con el teatro no se limitó a su papel de espectador, porque hay registros de que en su juventud escribió por lo menos tres libretos: María Estuardo, Iankel el judío y Boris Godunov, cuyos originales lamentablemente ya no existe. Pero esos no fueron sus únicos intentos de crear piezas dramáticas. A su amiga, la destacada actriz, Alexandra Kulikova, le expresó en una ocasión Si yo tuviera el más mínimo talento para escribir una comedia, aunque fuera un acto, lo escribiría para usted; y pensando en ella se planteó la posibilidad de adaptar Netochka Nezvanova para la escena. Asimismo, el primer boceto de la alquería de Stepanchikovo y sus vecinos había sido imaginado como una obra de teatro. Es más, ya al final de su vida, el autor estaba considerando la posibilidad de darle forma teatral a un episodio de los hermanos Karamazov, además de haber aiutorizado, en distintas ocasiones, la adaptación de varias de sus obras, siempre anotando algunas sugerencias, como cuando aconsejó al estudiante Mijaíl Fedorov: La escena no es un libro. Por lo tanto, entre más corta, me parece mejor. Nota: contiene imágenes y fotografías a color, impresas en papel esmaltado."Con esta difícil elección, el Teatro Libre de Bogotá va contra la corriente porque está reivindicando una vez más la tradición clásica y moderna de un teatro donde el diálogo denso, sin concesiones a lo espectacular, es lo que prima"A su amiga, la destacada actriz, Alexandra Kulikova, le expresó en una ocasión Si yo tuviera el más mínimo talento para escribir una comedia, aunque fuera un acto, lo escribiría para usted; y pensando en ella se planteó la posibilidad de adaptar Netochka Nezvanova para la escena. Asimismo, el primer boceto de la alquería de Stepanchikovo y sus vecinos había sido imaginado como una obra de teatro. Es más, ya al final de su vida, el autor estaba considerando la posibilidad de darle forma teatral a un episodio de los hermanos Karamazov, además de haber aiutorizado, en distintas ocasiones, la adaptación de varias de sus obras, siempre anotando algunas sugerencias, como cuando aconsejó al estudiante Mijaíl Fedorov: La escena no es un libro. Por lo tanto, entre más corta, me parece mejor. Nota: contiene imágenes y fotografías a color, impresas en papel esmaltado."Con esta difícil elección, el Teatro Libre de Bogotá va contra la corriente porque está reivindicando una vez más la tradición clásica y moderna de un teatro donde el diálogo denso, sin concesiones a lo espectacular, es lo que prima"Asimismo, el primer boceto de la alquería de Stepanchikovo y sus vecinos había sido imaginado como una obra de teatro. Es más, ya al final de su vida, el autor estaba considerando la posibilidad de darle forma teatral a un episodio de los hermanos Karamazov, además de haber aiutorizado, en distintas ocasiones, la adaptación de varias de sus obras, siempre anotando algunas sugerencias, como cuando aconsejó al estudiante Mijaíl Fedorov: La escena no es un libro. Por lo tanto, entre más corta, me parece mejor. Nota: contiene imágenes y fotografías a color, impresas en papel esmaltado."Con esta difícil elección, el Teatro Libre de Bogotá va contra la corriente porque está reivindicando una vez más la tradición clásica y moderna de un teatro donde el diálogo denso, sin concesiones a lo espectacular, es lo que prima"Nota: contiene imágenes y fotografías a color, impresas en papel esmaltado."Con esta difícil elección, el Teatro Libre de Bogotá va contra la corriente porque está reivindicando una vez más la tradición clásica y moderna de un teatro donde el diálogo denso, sin concesiones a lo espectacular, es lo que prima""Con esta difícil elección, el Teatro Libre de Bogotá va contra la corriente porque está reivindicando una vez más la tradición clásica y moderna de un teatro donde el diálogo denso, sin concesiones a lo espectacular, es lo que prima"Eduardo Gómez



Varios autores



Prólogo

¿El Shakespeare ruso?

Bibliografía

Crimen y castigo

El idiota

Los hermanos Karamazov

Los demonios

Fotos de los montajes

Recomendaciones para ti